LA RESISTENCIA, ante los últimos acontecimientos y el dialogo resultante entre el Gobierno, oposición y representantes de la Sociedad Civil auspiciado por la OEA, considera oportuno  expresar lo siguiente:

1. La OEA debió respetar y hacer suyo en todos sus alcances, el informe final de quien fue su  representante y enviado especial el ex Canciller de Guatemala Eduardo Stein, ya que al desconocerlo solo se ha cuestionado a si misma.

2. La crisis resultante del no  reconocimiento y aplicación del  informe anteriormente descrito, las  maniobras dilatorias de la dictadura, así como la aceptación de los  autores del debilitamiento democrático como participantes e impulsores de su reinstitucionalización, no podía tener otro  resultado que el  obtenido hasta ahora, el absoluto fracaso.

3. La persistente campaña de amedrentamiento y atropello a la sociedad civil en sus organizaciones sindicales, estudiantiles y sociales diversas, no hacen sino confirmar la intensión de perpetuarse en el poder a como de lugar, sin ninguna voluntad de diálogo.

4. Nuestra preocupación ante la  pasividad de los partidos políticos de oposición representados  en el Congreso de la República y ante la inoperatividad del diálogo auspiciado por la OEA, pudiendo convertirse ambas instancias en justificación y aval de la dictadura.

5. LA RESISTENCIA, como coordinadora de iniciativas democráticas, exige la convocatoria a nuevas elecciones generales como única forma viable de restaurar la democracia en nuestro país y se compromete ante la ciudadanía, a mantener con persistente dignidad la expresión de su voluntad.
 

Lima, 4 de Setiembre del 2000